Hoy para desayunar, tortas de aceite. ¡Que buenas! Siento debilidad por lo tradicional y artesano, me pierden los dulces de toda la vida.
A veces da miedo prepararlos, en ocasiones es difícil darle ese punto auténtico (hay tantas recetas, que encontrar una buena puede ser algo muy complicado). Pero ésta, ha de ser la receta original ¡Son ideales! Si las envolvemos en un envase de las que comercializa «Ines Rosales» no adivinamos cuál es la fabricada en el horno de casa. Es idéntica en aspecto, sabor y textura.
La torta de aceite es un dulce fino, crujiente y hojaldrado con una larga tradición en diversas fórmulas de la repostería Española. Sus ingredientes principales son: harina de trigo, aceite de oliva virgen extra, azúcar, anís, ajonjolí y sal.
Se desconoce el origen de las tortas de aceite. En España, los estudios de pastelería apuntan hacia recetas árabes, judías o mozárabes de la mitad meridional de la península ibérica. Se conservan relatos que las mencionan a finales del s.XVI.
Ingredientes (25 unidades):
- 150 G Aceite de oliva virgen extra
- 15 G Anís en grano
- 210 Agua
- 30 G Levadura fresca panadero
- 60 G Anís (licor seco o dulce)
- 60 G Azúcar
- 540 G Harina fuerza
- 1/2 cdta sal
- 30 G Semillas sésamo o ajonjolí
- Azúcar para espolvorear
Elaboración:
Poner el aceite de oliva y el anís en grano dentro de un cazo. Calentar a fuego medio (sin que llegue a humear, con calentarlo es suficiente).
Apartar del fuego y dejar templar.
Incorporar el agua y la levadura. Desleír la levadura.
Añadir el licor de anis y el azúcar. Mezclar hasta disolver.
En un cuenco grande colocar la harina y la sal.
Verter sobre la harina la preparación anterior. Trabajar los ingredientes hasta formar una masa brillante y consistente, que no se pegue en las manos. Esto llevará aproximadamente media hora (si tenéis robot amasador o panificadora, os facilitará mucho este trabajo).
Cuando la masa adquiera elasticidad y sea suave, agregar el ajonjolí y amasar cinco minutos más.
Tapar la masa con un paño de cocina y dejar levar en un lugar cálido y libre de corrientes de aire hasta que doble su volumen, aproximadamente una hora.
Precalentar el horno 200C calor arriba y abajo.
Disponer sobre la mesa de trabajo, dos hojas de horno del tamaño de la bandeja sobre las que se hornearan las tortas.
Dividir la masa en la masa porciones, el peso de cada porción ha de ser entre 30 y 40 G.
Bolear cada pieza y darle forma de torta. (yo realicé las tortas soble el papel de hornear, aplastando con las manos y estirando la masa con la palma de dentro hacia fuera. En cada bandeja podreís hornear tres o cutro piezas, depende del peso que escojais. Yo las realice de 40G).
Un vez formadas, espolvorear las tortas con azúcar.
Pasar un rodillo de cocina sobre la superficie de cada torta, para que el azúcar quede fijado.
Cuando el horno alcance la temperatura adecuada, meter la bandeja dentro y hornear las tortas de 8-12 minutos, hasta verlas doradas por ambas superficies (depende del horno y de las veces que abramos la puerta…)
Dejar enfriar sobre una rejilla.
Guardadas las tortas en un recipiente de lata. Se conservan en perfecto estado sin perder el crujiente ni el sabor, durante días.
Muchas gracias por esta receta tan estupenda gracias
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