¿En estos momentos existe algo más rico que una buena rebanada de bizcocho? En la cocina de cosmopolitan cuisine adoramos este tipo de dulces; principalmente por su sencillez, su sabor y su delicada textura. En esta ocasión se ha utilizado una receta fácil, que combina el clásico pastel de plátano, con el delicioso sabor de la nutella. Para obtener ese acabado tan fino y espectacular, el pastel ha sido horneado en el molde Kugelhopf Bundt de Nordic Ware®. Los moldes de la prestigiosa firma Nordic Ware® son famosos en el mundo entero, y no es de extrañar, los diseños y la calidad que ofrece son absolutamente fantásticos. Quien ya los haya probado, lo más seguro es que esté totalmente de acuerdo conmigo.
Si como en mi caso, tienes curiosidad y deseas recibir más información al respecto, en los próximos párrafos y antes de detallar la receta de ¨Bundt Cake Marmolado de plátano y Nutella¨, podrás leer un breve relato sobre la información recopilada acerca de la sorprendente historia que rodea a los moldes americanos más deseados de todos los tiempos; los Bundt Pan de Nordic Ware®.
Todo el mundo adora un Bundt Cake, ese distinguido y familiar pastel redondo con el agujero en el centro, y todos tenemos nuestros sabores y recuerdos favoritos asociados a él. ¿Pero… qué sabes sobre la historia del Bundt cake? ¿Sabías que los Bundt Cake Pans son en realidad una versión americanizada de un molde alemán denominado Gugelhopf? Así es, la historia del bizcocho Bundt, está ligada a la necesidad de que los inmigrantes alemanes pudiesen disfrutar en el territorio yankee de una Kaffeeklatsch (charla de café) como las que tenían en su lugar de origen.Puede que te sorprenda el saber que el Bundt Pan es una incorporación relativamente reciente al menaje de panificación y repostería estadounidense; ya que si por algún particular, antes de la década de 1950, querías un agujero en el núcleo de tu bizcocho, debías provocarlo tú mismo, después de ser horneado (y supongo, que comer ese bocado sin compartirlo con nadie… Je,je,je).
Entonces… ¿Dónde surgió la idea de crear un Bundt Cake Pan? ¿Que estimuló su popularidad y por qué después de 60 años, todavía seguimos buscando un molde Bundt para hornear los pasteles que adoramos en nuestros hogares?.
¿Sabías que…
según la revista Smithsonian, el Bundt Cake es «The Icon Cake of 60’s Comfort Food»? Además, este artilugio denominado Bundt Cake Pan, se encuentra atesorado en el Museo Nacional de la Historia Natural del instituto smithsoniano (evidentemente, no está ubicado al lado de las ¨Ruby Slippers de Dorothy¨ o de la¨Archie Bunker’s Chair¨ está en otra sala mucho más pequeña, al final del pasillo, ¡Pero allí está! y eso es todo un golpe de gracia para un simple molde de aluminio).
La historia de la torta Bundt comenzó de la siguiente manera:
David Dahlquist, un experto en metalurgia, y su esposa Dorothy, eran propietarios de una compañía de Minnesota que fabricaba artículos para hornear escandinavos (Rosette Irons y Ebelskiver).

David y Dorothy Dahlquist
En 1950, un grupo de mujeres de la Sociedad Hadassah local lo contactó. Durante la conversación le preguntaron si podría recrear el Gugelhupf Pan que recordaban que usaban sus madres en Europa. Dado que las cacerolas Gugelhupf originales eran muy pesadas, hechas de hierro fundido o una cerámica gruesa, éstos moldes no viajaban bien y por desgracia, debían quedar atrás.
Por otro lado, los pasteles y bizcochos americanos de la época eran demasiado ligeros y esponjosos, y las germanas añoraban los panes dulces y densos que disfrutaban en su infancia. Lamentablemente, esas antiguas recetas alemanas no funcionaban correctamente con un molde para pasteles convencional, ya que éstos carecían de un agujero central que era el que permitía que el calor del horno llegase a la masa hasta el interior del pastel, horneándolo de manera uniforme.
En un momento de reflexión, David Dahlquist se dirigió a su taller, situado en el sótano de su casa y reprodujo la bandeja Bundt con aluminio fundido (mucho más ligero), agregando unos pliegues adicionales a la forma del molde, para darle un toque especial y distinguido.
¿Por qué el Bundt Pan se llama Bundt? Bund significa en alemán club o grupo, y estos pasteles eran servidos en reuniones sociales. De hecho, en el sur de Alemania, el Gugelhupf también se llama Bundkuchen (Bund Cake). Más tarde, cuando llegó el momento de patentar el artículo, David Dalquist añadió una ¨t¨ al final de ¨bund¨, lo que terminó por denominarse ¨bundt¨, probablemente porque estaba cansado de corregir a las personas que hacían que la «d» fuera un sonido suave (aunque bien se podría pensar que era para propósitos de Marca Registrada¨®¨).
En esos momentos, el molde ganó la suficiente popularidad como para que muchos trabajadores del hogar adquirieran unas pocas; otras tantas se vendieron en los grandes almacenes locales, siendo inicialmente el precio original del nuevo»Bundt Pan» de $4.00.
En 1960, el libro de cocina Good Housekeeping mostró en la serie American Housewives cómo hornear un pastel de libra (típico de la repostería estadounidense) con un Bundt Pan. Con ello se consiguió que multitud de mujeres comenzaran a comprarlas para sus cocinas.
Más tarde, el pastel que definitivamente lo lanzó a la fama fue el ¨Tunnel of Fudge cake¨. Todos los años desde 1949, el concurso Pillsbury Bake Off reunía a mujeres de todo el país para exhibir sus creaciones reposteras (aún continúa emitiéndose). En 1966 Ella Helfrich usó un Bundt Pan para hornear su pastel ‘Tunnel of Fudge’ y… ¡Ella consiguió la segunda posición! En cuestión de días, la empresa Nordic Ware® recibió más de 200.000 solicitudes para adquirir la bandeja con chimenea central.
Desde ese momento el Bundt Cake Pan se puso de moda y en todas las casas se solicitaba uno de ellos.
Los libros y las revistas de cocina comenzaron a publicar recetas específicamente para ser horneadas en el nuevo Bundt Pan. Y a pesar de que en Alemania, el Gugelhupf a menudo estaba hecho con levadura de panadería, las recetas estadounidenses usaban como leudante la levadura química (Royal®) o Baking Powder. ¡Esto ya no era solo una torta para el Kaffeeklatsch alemán!
El Bundt era (y continúa siéndolo) el pastel perfecto; fácil de elaborar, versátil, lo suficientemente bueno para degustar en compañía y delicioso para los desayunos y las meriendas de toda la familia. Era el bizcocho perfecto para cualquier ocasión y lo bastante robusto para ser transportado sin desmoronarse.
Entre otras ventajas, el pastel de tipo Bundt Cake no necesitaba ningún adorno para lucir espectacular, ya que los moldes poseían unos contornos sensacionales y profundamente marcados, que quedaban estampados en el pastel logrando que éste se decorara a sí mismo. No era necesario crear diseños elaborados con cremas o figuras sobre la pieza, simplemente un glaseado sencillo o una pequeña cantidad de polvo de azúcar en su superficie eran suficientes para presentarlo perfecto.
Cuando se hacen listas de todas las comidas alemanas que se ingieren todos los días en Estados Unidos, siempre se ven los típicos perritos calientes o las hamburguesas, incluso el chucrut y la cerveza. Ahora, sabes que puedes agregar a ese repertorio el pastel con el agujero en el centro. Llámalo Gugelhupf, o llámalo Bundt, este pastel alemán ahora también es parte de la tradición culinaria estadounidense.
Fuente: 
Ingredientes (Molde con capacidad de 2,5 litros o 10 tazas):
- 440 G Harina
- 200 Ml Nata
- 4 Plátanos
- 4 Huevos
- 150 Ml Aceite vegetal
- 130 G Nutella
- 125 G Azúcar
- 50 Ml Leche
- 50 Ml Licor de avellanas
- 1 Cdta. Levadura
- 1 Cdta. Bicarbonato
- 1/2 Cdta. Sal
Elaboración:
Disponer sobre la mesa de trabajo todos los ingredientes a temperatura ambiente y con las cantidades debidamente medidas y pesadas.
Además, ubicar todas las herramientas y utensilios necesarios en la zona de trabajo, cerca de nuestro alcance.
Precalentar el horno a 180ºC con calor arriba y abajo. Colocar la rejilla del horno en su interior, de tal manera que cuando se ponga el molde en su superficie éste quede a media altura.
Engrasar el molde bundt, para ello pulverizar el interior con spray antiadherente y esparcirlo con un pincel (en su defecto engrasar con mantequilla y espolvorear con harina de trigo, retirando el exceso de la misma).Sobre un cuenco amplio, tamizar la harina, la sal, la levadura y el bicarbonato. Reservar.
Aparte, mezclar en otro bol la nata, la leche y el licor. Reservar.
Trocear los plátanos y machacarlos con ayuda de un tenedor, hasta que adquieran la textura de un puré. Reservar.
Batir con las varillas (preferiblemente eléctricas) los huevos con el azúcar, hasta conseguir una crema suave y blanquecina (el tiempo de batido en un robot de cocina tipo Bosch o kitchenaid ronda los 10 minutos).
Incorporar a la mezcla de huevos, el plátano machacado y batir hasta que esté totalmente integrado.
Añadir el aceite y continuar batiendo hasta integrarlo por completo.
Adicionar la mezcla de harina en tres veces, alternando con la mezcla de nata.
Seguir batiendo hasta obtener una masa cremosa y homogénea.
Separar 320 gr. de masa e integrar por completo en ella la nutella, mezclando con una espátula o lengua repostera.
Verter la masa en el molde, turnando cucharadas de la mezcla de plátano con la mezcla de nutella.
Golpear el molde para que la masa se asiente y no queden en ella burbujas ni alveolos de gran tamaño.
Cuando el horno haya alcanzado la temperatura adecuada, hornear el pastel durante 55 minutos.
Pasado el tiempo, verificar que está correctamente cocido con un testador o palillo. Si sale limpio, sacarlo del horno y dejar enfriar unos 5 o 10 minutos dentro del molde.
Tras ello, desmoldarlo sobre una rejilla y esperar a que se enfríe por completo para servirlo.