¿Todavía hay alguien que no conoce las archi famosas galletas Oreo®? En la despensa de Cosmopolitan cuisine no es muy habitual encontrar este tipo de alimento, en realidad, estas galletas llegaron hasta nuestra cocina en forma de regalo, y… ¿cómo resistirse? aunque no se trate de un producto precisamente sano, hay que reconocer que ¡están buenísimas! Para nosotros no son ninguna novedad, de hecho ya las conocíamos. Anteriormente las habíamos probado en alguna que otra ocasión, mientras soportamos la larga espera de un vuelo retrasado en un aeropuerto de regreso a España, Madrid.
Las galletas oreo® son de las más utilizadas internacionalmente en recetas de repostería. Se pueden encontrar recetas de todo tipo; tarta de queso con galletas oreo®, brownie con galletas oreo®, bundt cake con galletas oreo® o pequeños pasteles con galletas oreo®, como son en este caso los deliciosos cupcake de galletas oreo®.
Sabías que…
desde su creación en 1912, se han vendido más de 450.000 millones de Oreo®? Y que esta galleta genera a su empresa 2.500 millones de dólares al año?
Su presencia en España es relativamente reciente, ya que en este país se empezaron a comercializar en el año 1995. Puede que por ello, las galletas Oreo® aquí aún no hayan logrado alcanzar las citadas cotas de popularidad. Pero seguro que las nuevas generaciones ya la tienen entre sus favoritos. Y no es de extrañar, porque su éxito ha sido continuo e imparable desde su producción y en todos los países a los que han ido llegando.
El inconfundible sándwich de dos galletas de chocolate, unidas por una crema de vainilla y leche, tiene su origen en la isla neoyorquina de Manhattan. La capital financiera del mundo fue el lugar de nacimiento de las Oreo®, que fueron creadas por la National Biscuit Company, Nabisco. Las primeras unidades de Oreo® se vendían a granel en Nueva Jersey, por un precio de 25 centavos de dólar la libra (454 gr). La fecha oficial de la primera venta es el 6 de marzo de 1912, que, además, es celebrado cada año como el Día Nacional de Oreo® en Estados Unidos. Sin embargo, la marca comercial no sería registrada hasta unos días después, concretamente el 14 de marzo.
¿Y por qué se las llamaron Oreo®? El origen del nombre tampoco está claro, y existen diferentes teorías al respecto. Unos lo asocian a su envoltorio original, que era de color dorado, y a la traducción de la palabra oro al francés: or. Otros lo ligan al término griego oreo, que significa bello. En cualquier caso, esta denominación se ha mantenido a lo largo de toda su historia, aunque, en un principio, como Oreo Biscuit®, para en 1921 pasar a Oreo sandwich® y finalmente, a la denominación actual, Oreo Chocolate sandwich Cookie®: el sándwich de galleta de chocolate.
Sabías que…
oreo® es una galleta que ha batido récords y que además ha desarrollado un método de consumo?
Oreo® no solo es la galleta más reconocida y vendida en todo el mundo. A lo largo de su historia, ha desarrollado casi un movimiento paralelo, gracias a unas siempre originales campañas publicitarias y, por supuesto, a unas cualidades que le convierten en una galleta diferente al resto. Por ejemplo, su modo de consumo, como bien se encargó la marca de recordar en una de sus campañas, a modo de libro de instrucciones: primero se destapa; después, se lame la parte que contiene la crema, y por último, se moja en la leche. Según la marca, el 50% de sus consumidores siguen estos pasos.
Su diseño tampoco se ha mantenido uniforme en todo este tiempo. Siempre ha conservado las dos galletas de chocolate y la crema, con unas proporciones del 71% para las primeras y de un 29% para la segunda. Pero, las primeras que se pusieron a la venta, apenas tenían decoración. En las dos galletas aparecía la marca, y en sus bordes, unas discretas líneas. Pero esto también fue evolucionando. En 1924, un círculo empezó a rodear el nombre del producto. Así se mantuvo hasta 1952. Entonces, William A. Turnier, empleado de Nabisco, recibió el encargo de rediseñar la estética de la galleta. Y tanto éxito tuvo su idea que, desde ese año, se ha mantenido intacta. Turnier fue el ideólogo del estampado actual, con tréboles y una antena que sobresale del nombre de la galleta, y que no es otra cosa que el logotipo de Nabisco. También hay distintas teorías acerca del origen de este diseño, como la que dice que es similar al de un cuadro que pintó el propio Turnier y que tenía en su domicilio.El apartado estético ha sido, precisamente, uno de los fuertes de esta galleta, y que le ha permitido sobrevivir a modas y distintos estilos durante más de 100 años. Paul Goldberger, uno de los expertos y críticos en arquitectura más reconocidos de EEUU, escribió en el New York Times, con motivo del 75 aniversario, un artículo en el que se refería a su estructura: “Es una galleta que abraza la contradicción. No solo por lo oscuro de su exterior y la luz de su interior, sino por su diseño tan cuidadosamente adornado siendo un producto tan sencillo. Como un edificio que mezcla vidrio liso con gárgolas, esta galleta no hace sino trascender de la brecha que separa la modernidad de la tradición”.
Esa sencillez también ha permitido a sus creadores jugar con distintos sabores y formatos a lo largo de su historia, pero ninguno ha llegado a alcanzar el éxito del original. La primera fue una crema con toques de limón, en los años 20, que no prosperó. La que más ha resistido ha sido la versión Double Stuf, con doble cantidad de crema, desde 1975. Sucesivamente, han ido apareciendo las versiones Golden, con la galleta de sabor a vainilla; las bañadas en chocolate con leche y chocolate blanco, los helados, los formatos mini e, incluso, tartas y diferentes tipos de chocolatinas. Como ya se ha mencionado, sólo Oreo® genera a su empresa, Mondelez International, 2.500 millones de dólares al año. Y la historia continúa.
Sabías que…
su éxito en España llevó a que, en 2009, el Palacio de los Deportes acogiese a más de 1.400 personas para probar y distinguir a ciegas, entre una galleta Oreo® y una imitación?
Hasta el 97% de los asistentes acertaron con la original. El evento se convirtió en el récord Guinness en el que más gente se reunió para probar un producto a ciegas. Este no ha sido el único récord del que las Oreo® han sido protagonistas. En 2011, una publicación en su página de Facebook se convirtió en la que más “me gusta” recibió en un periodo de 24 horas: casi 115.000. El objetivo inicial que se había marcado estaba en 50.000. Aunque con una pequeña trampa: fue la primera compañía en afrontar ese reto.
En la actualidad, su página oficial de Facebook tiene más de 42 millones de seguidores. Porque Oreo® es un fenómeno global, que se vende en más 100 países.
FUENTE: Javier García Ropero para Cinco días-El país economía. Mayo, 2016
Después de leer este completo relato acerca de una de las galleta más famosas del mundo, vamos a trabajar en la cocina para vestirlas de fiesta. Se trata de crear unos pasteles o tartas en miniatura, llamados comúnmente «cupcakes«. Estas preciosas tartas de formato reducido conservan todo el sabor de las galletas oreo® y son toda una delicia.
Ingredientes (12 Unidades):
Bizcocho;
- 250 G Galletas Oreo® (peso unico de la parte oscura)
- 3 Huevos
- 80 G Mantequilla a temperatura ambiente
- 70 G Leche entera
- 12 G Azúcar (dos cucharadas soperas)
- 12 G Levadura química, tipo Royal®
- Una pizca de sal
Copete y acabado;
- 500Ml Nata para montar 35% MG (Materia Grasa)
- El relleno de las galletas Oreo®
- 80-100 G Azúcar en polvo o glacé
- 120 G Queso crema tipo philadelphia®
- Estabilizante para Nata (es opcional, pero recomendable si no van a ser consumidos de inmediato)
- 2-3 Galleta Oreo® (Solo la parte oscura)
- Galletas Oreo® completas (en este caso galletas oreo finas rellenas de crema de chocolate) para decorar
Elaboración:
- Bizcocho;
Precalentar el horno a 180°C calor arriba y abajo.
Disponer de un molde metálico para cupcake o magdalenas e introducir dentro de sus cavidades los capacillos o cápsulas para hornear los bizcochos de los cupcake.
Separar la parte oscura de las galletas oreo®, pesar 250 G e introducirlos en el recipiente de una picadora si se dispone de ella o meterlas dentro de una bolsa, tipo zip, por ejemplo, y triturarlas con la base de un vaso o similar. También se las puede machacar con un mortero, han de quedar finas pero no es necesario reducirlas a polvo.
Por otro lado, separar las claras de las yemas de huevo y depositarlas en cuencos limpios y secos.
Tomar el cuenco que contiene las yemas y añadir en su interior el azúcar. Batir (preferiblemente con varillas eléctricas) durante 5 minutos o hasta que la mezcla quede espumosa y blanquecina.
Añadir la leche y la mantequilla blanda y continúar batiendo durante dos minutos más.
Incorporar las galletas machacadas y la levadura en polvo. Remover con una espátula o lengua repostera y reservar.Coger el cuenco que contiene las claras de huevo, agregar la pizca de sal y montarlas con unas varillas (preferiblemente eléctricas) hasta que estén bien firmes.
Con la ayuda de una espátula o lengua repostera y movimientos envolventes, mezclar las claras de huevo montadas con la preparación de galletas reservada, hasta que esté todo bien integrado.
Repartir de forma equitativa la masa en las cavidades de los capacillos o cápsulas, llenando únicamente dos tercios de su capacidad, ya que la masa se expandirá con la acción del calor y aumentará su volumen de manera considerable.
Una vez el horno haya alcanzado la temperatura adecuada, meter el molde en su interior, quedando éste a media altura.
Hornear los bizcochitos durante 15 o 20 minutos y pinchar el centro de uno de ellos con un testador o palillo para comprobar que su interior está bien cocinado, una vez salga limpio, apagar el horno y sacar la bandeja. Dejar reposar las piezas dentro del molde durante 2 o 3 minutos y después, traspasarlos a una rejilla para que enfríen por completo.
- Copete y abado;
Introducir la parte oscura de las dos o tres galletas oreo® en el recipiente de una picadora si se dispone de ella o meterlas dentro de una bolsa, tipo zip, y triturarlas con la base de un vaso o similar. También se las puede machacar con un mortero, hasta que queden reducidas a polvo.En un cuenco amplio poner la nata, el queso crema y el relleno de las galletas oreo®. Batir el conjunto con unas varillas (preferiblemente eléctricas) a máxima potencia durante dos minutos. Después tamizar sobre la mezcla el azúcar glacé, el estabilizante para nata (opcional) y el polvo de las galletas oreo® y continuar batiendo dos minutos más o hasta que la nata esté completamente montada.
Traspasar la mezcla a una manga pastelera provista de una boquilla grande de estrella abierta.
Una vez la crema esté lista, aplicarla formando una espiral sobre los cupcakes.
Para finalizar, decorar los cupcake con una galleta oreo® (en esta ocasión son galletas oreo® finas, pero también quedarán muy bonitos coronados con mini oreo® o con mitades de la clásica galleta.
Conservar los cupcakes refrigerados y sacarlos a temperatura ambiente al menos 20 minutos antes de servirlos, así se apreciará mejor su sabor y la textura será más suave.